Restauración de "La Butanera aka La Sobrasada"

Os presento mi Vespa 200, modelo Iris, fabricación nacional del año 1985 (MOTOVESPA), que por fin y tras un largo año y medio ha podido ver la luz de nuevo.

Intentaré ser breve narrando la historia de esta Vespita. La encontré tras patearme toda la ciudad de Cádiz, ya que como todos los aficionados sabéis están cotizadas y pocos o nadie quiere desprenderse de una moto que te da buenas satisfacciones y algún que otro dolor de cabeza, pero como ese refrán dice “sarna con gusto no pica”...

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La encontré aparcada en la calle y una mujer que trabajaba cerca del lugar se dirigió a mi, ya que me veía con interés en ella, informándome que el dueño la había estacionado allí hacía ya tiempo, le pedí que si lo veía le diera mi teléfono a lo que accedió la señora, recibiendo la llamada esperada del propietario instantes después, una casualidad... acordé con él una reunión y tras una breve negociación me hice con ella a cambio de 200 eurillos.

Debo de decir que la vespita estaba en un estado, como podréis apreciar en las fotos, bastante bueno tras 25 añitos de lluvia, levante y salitre, sin picaduras, únicamente polvo y pequeñas manchas de óxido, también decir que estaba desgraciadamente gripada y dada de baja definitiva en Tráfico.

Pues tras un tiempo me puse manos a la obra, desmontaje completo, tornillo a tornillo, apuntando y fotografiando con detalle conexiones, despiece, tortillería, todo lo que como todos sabemos es de vital importancia si no queremos estar a punto de un ataque de nervios a la hora de volver a montarla. Aprovecho desde aquí para darle mi agradecimiento a Álvaro, compañero de trabajo y propietario de una “cucarachita preciosa” en proceso de restauración, y a “El Carburo”, por cederme su casita, su tiempo y su gran ayuda a la hora de realizar el desmontaje. Buena una vez terminado, al taller de chapa y pintura.

Referente al color, es un naranja melocotón, el número de serie no lo recuerdo en este momento, pero es de la Escudería Lamborghini.

Tras dos semanas de ansiada espera, me llaman y me dan la Vespa pintadita, en general muy bien, excepto algunos detallitos que sabéis que únicamente nos damos cuenta los dueños o tus colegas a los que les falta mirar con lupa, únicamente con el fin de tocarte los..... y sacarte una risas.

Ahora comienza la odisea, volver a montar el puzzle, gracias a mi amigo Teruel, el cual me presentó a Alonso, antiguo mecánico de Toyota y pieza clave en diversas marcas de Rally´s, el cual me montó la culona, me enseñó y me dedicó tiempo y su casa,  al cual siempre le estaré muy agradecido, lo que más me sorprendió es que la montó sin ver un esquema, foto o cualquier tipo de ayuda, todo un genio.

Tras 3 ó 4 semanas, ya que Alonso tiene su trabajo, una familia y demás se finalizó la Vespa, lo curioso y cosa que nos encanta y siempre nos deja boqui abiertos es que, dos patadas y arrancó. Se pueden llevar 10 años sumergidas en un lago que arrancan, estas monturas  nunca dejan de sorprendernos.

Recuerdo como anécdota que el día que la llevé a la ITV, me acompañó mi amigo Teruel, el cual tuvo que pasar la temida prueba con mi moto, ya que yo no atinaba ni para arrancarla de los nervios que tenía en el cuerpo, la posó a la primera, menos mal que el técnico conoce las vibraciones de estas motos y su característico petardeo.

Bueno, ya me he enrollado más que de sobra, pero siempre para mi, serán pocas con el tiempo, dedicación y dolores de cabeza que me ha traído, pero insignificante con los buenos momentos que me está dando… Ah, el día que la estrenaba, cuando iba por la autovía y más contento que unas pascuas, me dejó tirado durante unos minutos (para mi parecieron horas), se me olvidó ponerle el capuchón del cilindro, tuvo un gripado momentáneo, no me acordaba que es refrigeración forzada, cosas de pardillo y principiante... cuando se enfrió volvió a arrancar y corriendo a ponerle la pieza.

Aún quedan detalles que ponerle, esto es peor que un niño tonto como se dice por mi tierra, pero todo cuestión de presupuesto...

Un saludo a tod@s l@s perezos@s, Iván.